Día 2: Diversidad

El día comienza bien, tras dormir en mi cama infinita y disfrutar de un sueño intermitente, me lanzo a mi primera mañana de incertidumbre en la Toscana. El día comienza con unas tímidas e inciertas clases en sueco; digo tímidas porque no tengo ni puta idea y digo inciertas porque no se que coño hago aprendiendo sueco.

Después de un desayuno rico en leche y cereales acompañado de conversaciones en ingles y sueco, el día acompaña. Un sol cegador, una calor matadora y una “jornada” de lo mas increíble que se acaba torciendo al medio día. El clima mediterráneo pasa a convertirse en un clima más bien Británico.

Haciendo honor a la vida gastronomica Italiana, cocinamos o más bien Anna cocina unos macarrones con una rica salsa que hace con un sofrito, única y exclusivamente de procedencia vegetal. Esto es debido a que Brooke es vegetariana, y aunque a veces no saltemos su dieta (con ausencia de carnes), se intenta respetar, que menos, es la anfitriona.

Después de comer nos dirigimos los cuatro, Brooke, su hijo Federico, Anna y yo al súper, (no al mini sinó al super super que está prácticamente en las afueras), para reponer lo que viene siendo la comida. Compramos creo que de todo para una noche de lo más interesante, sobretodo vino, y es que la toscana sin vino no tiene mucho sentido.

Una vez en casa Anna, nuestra cocinera jefe, también conocida como Master Chef, se encarga de cocinar una comida al más puro estilo Indio con ayuda de Josh y Brooke, mientras tanto yo hago de algo muy parecido a "babysitter". La verdad es que soy realmente bueno, mientras que el niño me dice de jugar yo le escucho atentamente mientras miro el móvil.

A pocas horas de acabar de cocinar la cena se presentan los dos invitados, Lorenzo, un italiano autóctono de edad media que está con Anna, y "libzzy", una chica colombiana que habla español (entre otros idiomas) que está con Josh.

La cena parece un chiste malo que podría comenzar perfectamente con un: "saben aquell que diu que va un catalán, un sueco y un italiano...." (je,je.). Esta es la parte de la noche que hace referencia al titulo, “la diversidad”.

Durante la cena se aprecian idiomas y culturas tan dispares como Americano, catalán, británico, sueco, e italiano. A parte de la comida también somos ricos en diversidad de culturas. La cena vegetarianamente diferente hace honor a la variedad étnica con su procedencia india, curry y muchas cosas bonitas además de arroz triunfan sin lugar a dudas.

Cuando acabamos con la comida, el vino y su variedad en colores, tonos y sabores compite con las demás bebidas alcohólicas (obviamente yo solo bebía agua). Entre estas bebidas a destacar una cerveza de dudosa procedencia y un alcohol llamado "grapa" de dudosa calidad (puestos a dudar).

Al caer el punto más alto de la noche aparecen las luciérnagas, que compiten con el brillo de las estrellas, y la belleza de la luna, una vez más la Toscana enseña su lado más poético. Lorenzo se marcha, Josh desaparece con su chica, y aparecen unos nuevos inquilinos familia de Brooke Irma y Filipo, también conocido como el chico de la bandana.

Las conversaciones fluyen entre idiomas, como Nemo por el agua, (es decir jodidamente perdidos(broma fácil))  el italiano ingles, en ocasiones castellano, catalán y rara vez sueco, conducen un intercambio de opiniones hasta el final de la noche con la marcha de estos dos últimos invitados sorpresa.
El día ha sido largo la noche ha sido corta.
Mañana más y mejor. Vinos, música, y rock & roll.

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