viernes, 25 de julio de 2014

Día 3: vinos y "stalkers"

El día comienza soleado, en honor al clima el sol se va alternando con la lluvia, la cosa promete. Cuando me despierto oficialmente, me pego una ducha (de agua fría, o templada, el agua caliente es un material muy preciado) después desayuno acompañado de mi clase de sueco, aunque la cosas no avanza rápido, le pongo interés y en esta ocasión aprendo a decir los días los meses y poco más.

Después de un poco de sueco con cereales, salimos al jardín y hacemos unas pocas fotos mientras disfrutamos del día, como buen intercambio, enseño a Anna cuatro cosas rápidas muy básicas para hacer una foto y que no se mueva o no se queme con la luz.

Para comer, Anna, dueña y señora de la cocina, nos prepara unas maravillosas setas con pan de procedencia sueca que yo ayude a limpiar previamente (un trabajo de chinos, si se me permite la expresión). La verdad es que la comida fue realmente buena, lastima que tuviéramos pocas, por suerte pudimos complementar la comida con unos cuantos kg de embutido (que previamente mi querida madre me dio en Barcelona).

Después de comer, intercambiamos impresiones y posteriormente cada uno se invirtió su tiempo en hacer un poco lo que le dio la gana. En un momento de la tarde como si de relojes perfectamente sincronizados se tratara, coincidimos en el comedor. Brooke habla con un Josh recién levantado que come casi a las 5 de la tarde ( eso me suena a algo muy familiar). Durante la comida, merienda, cena de este, dicha anfitriona nos enseña unos libros de lo más interesante sobre un fotógrafo, Horst, el que curiosamente fue amigo de su abuelo. Posteriormente la conversación deriva en amigos, pintores del pasado y aficionados a Pollock. Todo muy hipster y culto a la vez.

Durante la tarde y después de conversaciones especialmente cultas sobre arte, Brooke nos habla sobre la llegada de nuevos inquilinos el próximo lunes, (o eso creo) concretamente la de un chico de Taiwán que la tiene realmente inquieta, además una pareja que vendrá el lunes de procedencia desconocida para mi (creo que franceses).
Con el caer del sol, nosotros caemos a la ciudad (je,je). Después de aparcar en Barga (en un estacionamiento exclusivo para motos), caminamos entre callejuelas al mas puro estilo el born/raval de Barcelona, todo muy autentico. Banderas italianas cuelgan de las ventanas, las paredes de rocas, y un suelo irregular cierran el sello que hace original dicha ciudad.

Una vez en el restaurante, nos atiende un amigo de Brooke (esto no es difícil porque el pueblo es muy pequeño y todos se conocen), durante la cena nos cruzamos con una serie de personas disfrazadas de una especie de guardia real suiza, esto ameniza la llegada de Lorenzo el "novio" de Anna. Antes de irnos saboreamos de nuevo la tradición italiana con un café "correcto", al parecer una especie de carajillo pero en suave.

Dejando atrás restaurantes, cafés, y guardias suiza con campanadas por el día de Sant cristobal (una historia un tanto particular sobre un santo que el papa hizo real, pero que en verdad no lo es, o algo así), paseamos por las oscuras y antiguas calles de Barga. Cuando llegamos a una plaza (cuyo nombre no recuerdo), la gente se agolpa tomando vinos, y "birra" (cerveza en italiano). La música varía, tocan desde canciones tradicionales italianas hasta covers de Queen.

Lo olvidaba a todo esto Josh está enfermo en casa con un buen gripazo, nosotros tenemos su pizza en el coche la cual llevaremos dentro de 5 horas, pero esto es otra historia que contare más adelante.
Después de un par de vinos y alguna birra los bares de la plaza empiezan a cerrar, nosotros tenemos la ocasión de conocer a gente muy “particular” y de de todo tipo, por ejemplo uno que odia  poetas y  músicos por igual y que a la vez es un fetichista de los pies (lo digo por un par de piropos que le escuche). Las conversaciones con este caballero cobraron interés cuando un miembro del anterior grupo de música mencionado se sienta a tomar algo con nosotros y habla con este hombre (que tiene unas ideas bastante antiguas).

Cuando nos marchamos de esta plaza (entre otras cosas porque nos hemos quedado solos y todos los bares estan cerrados) nos dirigimos entre calles y vinos a una especie de parque donde nos esperan unos mojitos (probablemente el peor que he probado en mi vida por la desmesurada cantidad de azúcar) y muchos borrachos. Mientras transcurre la noche, conocemos gente, mayoritariamente italianos, cada uno con una historia y un vino diferente, pero todas ellas distintas, aunque igual de interesantes, el único problema son los stalkers.

Por lo visto este tipo de personas son los típicos pesados tiracañas conocidos por Brooke como "acosadores". Desde mi punto de vista es el típico borracho que asalta mujeres durante una noche de fiesta.

Cuando decidimos volver a casa, Anna y yo debatimos que hacer con la pizza anteriormente mencionada de Josh, (lleva 5 horas en el coche) finalmente nos comemos la mitad, aunque antes le dejamos una nota explicativa diciendole que mañana Brooke le hará un buen desayuno. Mentira, al día siguiente se comió la otra media pizza y no hubo desayuno.


Después de un dia tan completo lleno de vinos, stalkers, fotografía y arte, parece ser que cualquier día que este por venir no podrá ser superior a este, o si. 


Si os apetce y quereis seguirme para disfrutar de maravillosas fotos de la toscana podeis hacerlo en instagram: vader_09

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